Apenas quedan unos cuantos cabos sueltos que atar antes de llegar al fin. Pero ya sabéis que a Daniel le gustan los finales redondos, donde todo queda rematado como Dios manda :)
Así que, coged aire y... ¡a por ello!
¡Tres...!
¡Tres...!
LA
CASA DE LOS CEREZOS
por L. G. Morgan
15. De resaca
Fue como si otra vez me despertara de un sueño. Sin mediar transición ninguna me encontré de nuevo en mi saco de dormir, sin saber cómo había regresado.
El Sr. Antón seguía durmiendo en la tumbona y no había ni rastro del niño.
.......................................................................